LA GUITARRA
La guitarra es un instrumento musical de cuerda pulsada, compuesto de una caja de madera, un mástil sobre el que va adosado el diapasón o trastero, generalmente con un agujero acústico en el centro de la tapa y seis cuerdas. Sobre el diapasón van incrustados los trastes, que permiten los diferentes tonos. Su nombre específico es guitarra clásica o guitarra española
Es el instrumento más utilizado en géneros como blues, rock y flamenco, y bastante frecuente en cantautores. También es utilizada en géneros tales como rancheras y gruperas, además del folclore de varios países.
Cuando el instrumento es más pequeño que una guitarra se denomina requinto y cuando es más grande guitarrón. Este último es de uso frecuente por los mariachis.
Partes de la guitarra
La guitarra ha sufrido variaciones en su forma a lo largo de los siglos. Además del número de cuerdas, las variaciones del instrumento han surgido para adaptarlo a las necesidades del intérprete hasta adoptar la forma actual. Este instrumento está fabricado con madera prácticamente en su totalidad y los tipos empleados principalmente en su fabricación son las de palosanto de la India o de Brasil (Bulnesia sarmientoi), abeto, cedro de Canadá, pino, ciprés y ébano, en función del tipo de guitarra (clásica o flamenca).
Básicamente, la guitarra está compuesta por la caja de resonancia, el mástil, el puente, el diapasón, los trastes, las cuerdas y el clavijero. Algunas guitarras poseen más de un diapasón (hasta un máximo conocido de 6 mástiles) o sobrepasan las 7 cuerdas.
Tras ser encolados todos los elementos que forman la caja de resonancia, se une con el mango y se incluyen refuerzos en el contorno de las dos tapas, en el centro del fondo y en las uniones inferiores y superiores de los aros. Posteriormente se adhiere el diapasón. Entre el mástil y el clavijero se coloca la cejilla que sirve para apoyar y separar las cuerdas. La cejilla habitualmente es de marfil, hueso, plástico o incluso metálica, en función de la calidad del instrumento.
Una vez todos los elementos que forman la guitarra han sido unidos, se procede a su barnizado. Existen dos formas de llevar a cabo este proceso, una más costosa y trabajosa que consiste en barnizar el instrumento a mano con goma laca; y la otra que es barnizar con una pistola a base de poliuretano que seca rápidamente. El inconveniente de este último método es que el barniz forma una placa sobre la caja de resonancia que le resta sonido al instrumento.
Posteriormente se realiza el aplanado del diapasón y la colocación de los trastes, los cuales suelen ser de alpaca o latón. Es sumamente importante que el trasteado sea perfecto ya que de él depende la afinación de la guitarra. Acto seguido, en la parte inferior de la tapa armónica se coloca el puente, que suele ser de palosanto y es donde van sujetas las cuerdas en ese extremo del instrumento. Por último, se colocan las castero, generalmente con un agujero acústico en el centro de la tapa y seis cuerdas. Sobre el diapasón van incrustados los trastes, que permiten los diferentes tonos. Su nombre específico es guitarra clásica o guitarra española
Es el instrumento más utilizado en géneros como blues, rock y flamenco, y bastante frecuente en cantautores. También es utilizada en géneros tales como rancheras y gruperas, además del folclore de varios países.
Cuando el instrumento es más pequeño que una guitarra se denomina requinto y cuando es más grande guitarrón. Este último es de uso frecuente por los mariachis.
La guitarra ha sufrido variaciones en su forma a lo largo de los siglos. Además del número de cuerdas, las variaciones del instrumento han surgido para adaptarlo a las necesidades del intérprete hasta adoptar la forma actual. Este instrumento está fabricado con madera prácticamente en su totalidad y los tipos empleados principalmente en su fabricación son las de palosanto de la India o de Brasil (Bulnesia sarmientoi), abeto, cedro de Canadá, pino, ciprés y ébano, en función del tipo de guitarra (clásica o flamenca).Básicamente, la guitarra está compuesta por la caja de resonancia, el mástil, el puente, el diapasón, los trastes, las cuerdas y el clavijero. Algunas guitarras poseen más de un diapasón (hasta un máximo conocido de 6 mástiles) o sobrepasan las 7 cuerdas.
Tras ser encolados todos los elementos que forman la caja de resonancia, se une con el mango y se incluyen refuerzos en el contorno de las dos tapas, en el centro del fondo y en las uniones inferiores y superiores de los aros. Posteriormente se adhiere el diapasón. Entre el mástil y el clavijero se coloca la cejilla que sirve para apoyar y separar las cuerdas. La cejilla habitualmente es de marfil, hueso, plástico o incluso metálica, en función de la calidad del instrumento.
Una vez todos los elementos que forman la guitarra han sido unidos, se procede a su barnizado. Existen dos formas de llevar a cabo este proceso, una más costosa y trabajosa que consiste en barnizar el instrumento a mano con goma laca; y la otra que es barnizar con una pistola a base de poliuretano que seca rápidamente. El inconveniente de este último método es que el barniz forma una placa sobre la caja de resonancia que le resta sonido al instrumento.
Posteriormente se realiza el aplanado del diapasón y la colocación de los trastes, los cuales suelen ser de alpaca o latón. Es sumamente importante que el trasteado sea perfecto ya que de él depende la afinación de la guitarra. Acto seguido, en la parte inferior de la tapa armónica se coloca ellavijas y las cuerdas. Antiguamente las cuerdas eran de tripa de animal pero en las guitarras modernas son de nylon.
Caja de resonancia
La caja de resonancia la conforman el fondo, la tapa armónica y los aros laterales. Los dos primeros son planos. El fondo está construido en madera de palosanto mientras que la tapa puede ser de pino, abeto, cedro o, en ocasiones, de ciprés. La tapa armónica tiene una perforación en su parte intermedia, llamada "boca" o "tarraja", y está reforzada por siete barras finas de madera que reciben el nombre de "varetas". Estas varetas están dispuestas en la parte interior y tienen forma de abanico. El número de varetas dentro de una guitarra depende del fabricante de la misma. Los aros son dos piezas largas y estrechas fabricadas con palosanto, curvadas a fuego y unidas en los extremos superior e inferior de la caja. Su unión se asegura en el interior con dos tacos de madera colocados uno en la base del mango y otro en la parte contraria. Los aros están reforzados a lo largo de su parte interna con dos tiras de madera que reciben el nombre de "tapajuntas".
Mástil
El mástil está construido con madera de palosanto o cedro y está formado por el clavijero, el mástil y la quilla o zoque. En las guitarras modernas las clavijas están incluidas dentro de clavijeros metálicos, a diferencia del método empleado guitarras anteriores que consistía en insertar directamente las clavijas en la madera del clavijero. El clavijero está situado en el extremo del diapasón. Los clavijeros modernos tienen dos cortes verticales y están preparados para recibir los huesos, que son las pequeñas piezas en las cuerdas van enrolladas. Las clavijas metálicas quedan en la parte exterior del clavijero y se emplean para afinar el instrumento mediante la tensión que ejercen sobre las cuerdas. Su tensión puede modificarse para la afinación mediante un sistema de tornillos sin fin impulsados por las clavijas, que implican pequeños rodillos sobre los cuales se envuelven las cuerdas. Éstas pasan a continuación por el puente superior, en el cual se cavan pequeños surcos que guían cada cuerda hacia el diapasón hasta llegar al clavijero. El clavijero puede llamarse también pala o maquinaria; de este mecanismo depende la afinación de las cuerdas de la guitarra.
La parte más larga del mango recibe el nombre de mástil y está cubierto con el diapasón, que es un trozo de madera, habitualmente de palosanto o ébano, sobre el que presionan los dedos las cuerdas de la guitarra. La quilla o zoque es la base del mango que se fija a la caja de resonancia.
Historia
Origen
Los orígenes y evolución de la guitarra no son demasiado claros, ya que numerosos instrumentos similares eran utilizados en la Antigüedad, por lo que es usual seguir la trayectoria de este instrumento a través de las representaciones pictóricas y esculturales encontradas a lo largo de la historia. Existen evidencias arqueológicas en bajorrelieves encontrados en Alaça Hüyük (norte de la actual Turquía) de que en torno al año 1000 a. C. los hititas y asirios crearon instrumentos de cuerda parecidos a la lira —el instrumento de varias cuerdas más sencillo y antiguo del mundo— pero con el agregado de una caja de resonancia, por lo que serían antecesores de la guitarra. También se han encontrado representaciones en dibujos del antiguo Egipto que se asemejan a un instrumento similar a la guitarra.
Existen dos hipótesis acerca de sus orígenes. Una de ellas le da un origen greco-romano y piensa es un descendiente de la fidícula y la otra considera que la guitarra es un instrumento introducido por los árabes durante la invasión musulmana de la Península Ibérica y que posteriormente evolucionó en España. Según la primera hipótesis, estos instrumentos llegaron hasta los griegos, que deformaron ligeramente su nombre, kizára o kettarah, que en castellano se terminó llamando cítara. Este hecho ha dado lugar a suponer que la guitarra deriva de la cítara griega y romana, a las que se le habría añadido un mango al comienzo de nuestra era. Muchos estudiosos y musicólogos atribuyen la llegada de la guitarra a España por medio del imperio Romano en el año 400.La otra hipótesis sostiene que el primer instrumento con mástil fue la ud árabe, cuyo nombre los españoles terminaron fundiendo erróneamente con su artículo: "la ud" femenina se convirtió en el masculino "laúd". Fueron precisamente los árabes quienes introdujeron el instrumento en España, donde evolucionó de acuerdo a los gustos musicales de la plebe bajo dominación musulmana.
En la India estos instrumentos eran conocidos en idioma sánscrito como sitar (instrumento descendiente de la vina) , palabra que proviene de dos palabras indoeuropeas que darían origen a la palabra española "guitarra": la raíz guīt (que produjo las palabras sánscritas guitá: ‘canción’, o sangīt: ‘música’) y la raíz tar, que significa ‘cuerda’ o ‘acorde’.
Edad Media
En los siglos XI y XII pueden distingurse dos tipos de "guitarres" o "guiternes". Por un lado la morisca o mandora, con forma ovalada de media pera y que se asemeja al laúd árabe y a la mandolina. Por otro lado la guitarra latina, una evolución de las antiguas cedras o cítaras, de fondo plano, unida por aros con mango largo y cuyo clavijero era similar al del violín. La primera de ellas concuerda con la hipótesis del origen oriental de la guitarra, una especie de laúd asirio que se habría extendido por Persia y Arabia, hasta llegar a España durante la estancia árabe en la Península Ibérica. La segunda, reforzaría la hipótesis del origen greco-latino del instrumento. Ambos tipos están representados en las miniaturas de las Cantigas de Santa María de Alfonso X el Sabio de 1270 aunque una de las representaciones más antiguas que se conservan está en Europa Occidental en un Pasionario de la abadía de Zwiefalten del año 1180.
En el siglo XIV, los poetas medievales franceses Guillaume de Machaut y Eustache Deschamps nombran en sus obras a la "guiterna" sin precisar el tipo.
La guitarra latina evolucionó hasta dar lugar a dos instrumentos diferentes: la vihuela, que estaba dotada de seis órdenes (cuerdas dobles) y que tuvo una amplia difusión entre la aristocracia y los trovadores y músicos profesionales; y la guitarra, de cuatro órdenes y de uso más popular.
Siglo XVI
En el siglo XVI comienzan a realizarse numerosas composiciones para guitarra. Esta gran producción tiene como centro a España. La primera obra para guitarra de cuatro órdenes aparece en la obra Tres libros de música en cifra para vihuela publicada en 1546 por Alonso Mudarra en Sevilla. En esa época era habitual confundir los nombres de estos instrumentos y fue a finales de siglo cuando comenzaron a diferenciarse. La guitarra fue utilizada principalmente como instrumento de acompañamiento y principalmente con la técnica del rasgueado.
Siglo XVII
El tratado más antiguo sobre la guitarra española fue publicado en Barcelona en 1596 por Juan Carlos Amat. En 1606 Girolamo Montesardo publicó en Bolonia la primera gran obra para guitarra titulada Nuova inventione d'involatura per sonare Il balleti sopra la chitarra espagnuola y G. A. Colonna Intavolatura di chitarra alla spagnuola en 1620.
Habitualmente se atribuye la inclusión de la quinta cuerda al músico y poeta andaluz Vicente Espinel. La atribución de esta invención la realizó Lope de Vega, pero fue refutada por Nicolao Doici de Velasco (1640) y por Gaspar Sanz (1684) en sus tratados sobre la guitarra española. Sustentan sus afirmaciones en el hecho de que once años antes del nacimiento de Espinel, Bermudo mencionó una guitarra de cinco órdenes. No obstante, aunque Espinel no fuera el inventor de la guitarra española de cinco órdenes, probablemente fue quien más se encargó de su difusión popular en todas las clases sociales de España.El Nuevo método por cifra para tañer guitarra de cinco cuerdas publicado en 1630 Doici de Velasco es el más antiguo conocido y en él afirma "En Francia, Italia y demás países, a la guitarra se le llama española desde que Espinel puso la quinta cuerda, quedando tan perfecta como el laúd, el arpa, la tiorba y el clavicordio y aún más abundante que éstos".
Otros autores contribuyeron de forma destacada a la literatura sobre la guitarra, como Luis de Briceño en 1626, Lucas Ruiz de Ribayaz y Francisco Guerau, entre otros. En la Península Ibérica la guitarra era ya muy utilizada a finales del siglo XVII, cuando Gaspar Sanz compuso su Instrucción de música sobre la guitarra española y método de sus primeros rudimentos, hasta tañerla con destreza.Anteriormente había guitarras de nueve cuerdas: una cuerda simple y cuatro "órdenes".
En todo caso, parece claro que fue en España donde tomó carta de naturaleza, pues a diferencia de las guitarras construidas en otros países y lugares de Europa, donde se fabricaban guitarras sobrecargadas de incrustaciones y adornos que la hacían casi imposible de tocar, la guitarra española se hacía para ser tocada y fue tan popular que incluso Sebastián de Covarrubias, capellán de Felipe II y lexicógrafo español, llegó a decir: "La guitarra no vale más que un cencerro, es tan fácil de tocar que no existe un campesino que no sea un guitarrista".
Aunque todos los países reivindican su intervención en la invención de la guitarra (con especial mención de Francia) aspectos tales como la forma, la estructura y la afinación, derivan directamente de la guitarra tal como los luthieres ibéricos la diseñaban, sin olvidarnos de los europeos como Johan Stauffer, de quien derivan los diseños de su discípulo C. F. Martin.
Siglos XVIII y XIX
Iniciado el siglo XVIII Jacob Otto agrega la sexta cuerda a la guitarra y se estandariza la afinación moderna, el cambio más significativo sufrido por este instrumento. A mediados de siglo, la historia de la guitarra moderna alcanza un gran apogeo con el español Francisco Tarrega, creador de la escuela moderna y autor del cambio en el uso del posicionamiento de las manos y la manera de pulsar las cuerdas.
A finales del siglo XVIII y principios del XIX, algunas guitarras usaban seis cuerdas simples y emplearon unas barras de refuerzo debajo de la tapa armónica. Estas barras fueron añadidas para reforzar la estructura y permitieron adelgazar la tapa para obtener una mayor resonancia y una mejor distribución del sonido a lo largo de la tapa armónica. Otros desarrollos contemporáneos incluyen el uso de un mástil reforzado y elevado usando madera de ébano o palisandro, y la aparición de un mecanismo de tornillo metálico en lugar de las clavijas de madera para afinar. Es importante destacar que el trastero elevado ha tenido un gran impacto en la técnica del instrumento porque las cuerdas estaban demasiado lejos de la tapa armónica de forma que había que apoyar uno de los dedos de la mano derecha para que sirviera de soporte a los demás. Estas guitarras serían reconocidas inconfundiblemente como las primeras guitarras clásicas.
En los comienzos del siglo XIX, en los trabajos de los españoles Agustín Caro, Manuel González, Antonio de Lorca, Manuel Gutiérrez y otros constructores europeos incluyendo a René Lacote y al vienés Johann Stauffer encontramos las características de los precursores más directos de la guitarra clásica moderna. Johann Stauffer tiene una reputación legendaria. En su tienda aprendió a construir guitarras C. F. Martin, que luego se trasladaría a Estados Unidos y cuya firma sigue construyendo guitarras hoy en día. También desarrolló el trastero elevado, a petición de Luigi Legnani, el guitarrista y primer intérprete de los conciertos del violinista genovés Niccolò Paganini. Sus otros avances en la construcción de la guitarra incluyen un mástil ajustable y reforzado con acero y las clavijas de tornillo sin fin que todavía se usan en las guitarras modernas.
Hacia 1850 empezó el trabajo de Antonio Torres Jurado. Con el apoyo de Julián Arcas, ambos almerienses, y sus propias y brillantes intuiciones, Antonio Torres Jurado refinó los soportes estructurales de la guitarra incluyendo siete varas extendidas bajo la tapa armónica. Aumentó también el tamaño de la caja de resonancia y el ancho del mástil. Estas innovaciones influyeron en la mejora del volumen del sonido y la respuesta en los bajos así como el descubrimiento de una técnica para la mano izquierda para el enriquecimiento del repertorio. Ahora la guitarra ya estaba preparada tanto para las demandas del solista como para las del conjunto instrumental. La tradición constructiva en Almería se ha mantenido hasta nuestros días con constructores como Gerundino Fernández García.
Siglo XX
El luthier español José Ramírez III junto al guitarrista Narciso Yepes le agregaron cuatro cuerdas más en las graves, sobre un amplio mástil cuyos múltiples trastes permiten ampliar notablemente la gama de sonidos de la mano izquierda. Narciso Yepes tocó por primera vez esta guitarra de diez cuerdas en Berlín en 1964 y, a partir de ese año, fue su instrumento habitual en los conciertos, especializándose en piezas renacentistas y barrocas.
Tipos de guitarra
Existen dos tipos básicos de guitarra: la guitarra clásica, que puede ser de estudio o de concierto, según pequeñas variaciones en sus dimensiones, maderas y calidad de construcción, que dan más sonoridad y calidad a la de concierto, naturalmente; y la guitarra flamenca, de tamaño ligeramente menor que la clásica, distintas maderas y otras variaciones que la hacen menos resonante pero más percusiva.
Existen otros dos instrumentos íntimamente emparentados con la guitarra española, pues se afinan igual y se basan en los mismos conceptos fundamentales, si bien cada modelo tiene un repertorio específico o cuando menos preferente en cuya ejecución se usan técnicas a veces exclusivas: la guitarra acústica, podría decirse que es la versión estadounidense de la guitarra española, ya que en su diseño original no se emplearon las innovaciones de Antonio Torres Jurado, sino las de C. F. Martin. La diferencia fundamental es que lleva cuerdas de metal en lugar de cuerdas de tripa o nylon. Suele ser de mayor tamaño y su diseño es mucho más variado que en la guitarra española; y la guitarra eléctrica, inventada en Estados Unidos, de cuerpo sólido, semisólido o de caja de madera, caoba, arce, fresno, etc. y cuyo sonido se produce debido a la resonancia del cuerpo que se amplifica a través de un sistema alimentado por energía eléctrica (pastillas eléctricas).
Guitarra acústica
La guitarra acústica es un tipo de guitarra con cuerdas de metal, cuyo sonido se genera mediante la vibración de las cuerdas que se amplifican en una caja acústica de madera o algún acrílico. El adjetivo "acústica" es tomado directamente del inglés acoustic guitar por el uso que de dicho adjetivo que hacen los anglófonos, para diferenciar la guitarra de caja con respecto a la guitarra eléctrica. Es claramente redundante, pues la guitarra, por definición, es un instrumento acústico. La guitarra acústica deriva de los diseños de C. F. Martin y Orville Gibson, principalmente, luthieres estadounidenses que desarrollaron su actividad principalmente a finales del siglo XIX. También son conocidas como western guitars (literalmente "guitarras del oeste"), lo que se acerca más a su naturaleza y a la clase de música que las hizo populares.
Como las españolas estas guitarras se llaman así por emitir su sonido sin ningún tipo de amplificación eléctrica, sólo por transducción de la fuerza mecánica.
Guitarra de flamenco
En España existe una variante muy extendida, similar a la guitarra clásica, de la que es difícil distinguirla a simple vista, conocida como guitarra de flamenco o guitarra flamenca. Varía su sonido por una construcción ligeramente distinta y el uso de distintos tipos de maderas. La guitarra flamenca tiene un sonido más percusivo, su caja es un poco más estrecha, y generalmente las cuerdas están más cerca del diapasón.
La guitarra flamenca tiene menos sonoridad y ofrece menos volumen que una guitarra española de concierto, pero su sonido es más brillante, y su ejecución es más fácil y rápida, debido a la menor altura de las cuerdas, lo que permite que se pueda hacer menos presión con los dedos de la mano izquierda sobre el diapasón. Tradicionalmente las clavijas de afinación eran completamente de palo y se embutían en la pala de la guitarra de forma perpendicular a ella. Suele llevar debajo de la roseta o agujero un guardapúas, golpeador o protector (a veces también uno superior), para evitar que los rasgueos y golpes que se dan en la tapa armónica, tan típicos en el flamenco, afecten a la madera.
Guitarra eléctrica
Una guitarra eléctrica es una guitarra con uno o más transductores electromagnéticos llamados pastillas que convierten las vibraciones de las cuerdas en señales eléctricas capaces de ser amplificadas y procesadas. Hay tres tipos fundamentales de guitarras eléctricas: las de cuerpo sólido, las de cuerpo semisólido y las de cuerpo hueco. Históricamente las primeras en inventarse fueron las de cuerpo hueco, al derivarse de guitarras de caja a las que se incorporaba un micrófono para poderse escuchar en las bandas de jazz.
Las guitarras de cuerpo sólido carecen de caja de resonancia, de forma que el cuerpo es un trozo de madera en el que van embutidos los micrófonos o pastillas. Las guitarras eléctricas de cuerpo semisólido se caracterizan por tener, a veces, agujeros al exterior con formas en "f" similares a los de las cajas de resonancia de los violines y otros instrumentos acústicos. Las guitarras semisólidas, tienen un bloque central para evitar los acoples. Algunas guitarras eléctricas también cuentan con un sistema en el puente que genera un efecto de vibrato llamado palanca o trémolo. La guitarra eléctrica necesita siempre ser conectada a un amplificador o a un sistema de amplificación, mediante un cable. Entre los fabricantes reconocidos de este tipo de guitarras se encuentran marcas como Gibson, Fender, Epiphone, Ibanez, PRS, Jackson, Parker, Cort, Yamaha, entre otros.
Guitarra electroacústica
Una guitarra electroacústica es una guitarra clásica a la que se le han añadido pastillas, micrófonos o transductores para amplificar su sonido. También son llamadas guitarras electrificadas, término que hemos de reputar sinónimo, y que resalta el hecho de que el sistema de previo puede haberse instalado en origen o por el propio usuario.
La electrificación de una guitarra de caja es el uso del micrófono, ya que se conecta como una guitarra eléctrica a un amplificador externo. Ello evita en gran medida los acoples y facilita la labor del ingeniero de sonido en las grabaciones. Sin embargo, el sonido no es exactamente el mismo, ya que el micrófono que recoge el sonido se encuentra dentro de la caja y no fuera, que es donde se escucha el sonido real de la guitarra.
La diferencia con una guitarra eléctrica de caja (que son las que se usan habitualmente en el jazz) es sobre todo el tipo de transductor, pues mientras estas guitarras usan un transductor piezoeléctrico dando un sonido más cristalino, agudo y natural, la guitarra eléctrica usa transductores electromagnéticos que dan un sonido distinto, más cargado de frecuencias medias.
Guitarra MIDI
Son guitarras especiales o adaptadores para guitarras convencionales que permiten controlar un sintetizador vía MIDI (protocolo de transmisión de datos que permite enviar información musical entre distintos dispositivos conectados por medio de cables). De esta manera, un guitarrista que no tiene habilidad para ejecutar un teclado o un órgano electrónico puede dispararlos desde una guitarra MIDI.
Una técnica básica es la de utilizar un conversor monofónico de frecuencia de audio a MIDI tomando la señal de audio de la guitarra por medio de colocar un micrófono en la boca de la misma o por medio de su salida de audio. También se comercializan puentes más sofisticados que pueden detectar la vibración de cada cuerda por separado de tal forma de poder ejecutar acordes, es decir, que poseen polifonía de 6 voces o simultaneidad de disparo de notas.
Guitarras del Renacimiento y Barroco
Las guitarras del Renacimiento y Barroco son ancestros de las guitarras clásicas. Son más delicadas y producen un sonido más débil. Son más fáciles de distinguir de otras guitarras, ya que su cuerpo es más delgado y plano.
Guitarras rusas
Estas guitarras contienen siete cuerdas en vez de seis. La afinación de esta guitarra es completamente distinta a la española, ya que no es simplemente una guitarra acústica con una cuerda añadida. Tradicionalmente, se utiliza una afinación abierta en Sol mayor. (también existe la balalaica)
Variaciones sobre la guitarra tradicional
Desde sus inicios la guitarra fue objeto de experimentaciones muy numerosas, y sólo una parte de estos instrumentos son todavía utilizados hoy, hasta de manera marginal.
Las primeras guitarras tenían cuatro cuerdas como los instrumentos de los que procedía, luego se agregó una quinta y posteriormente una sexta (el bordon), que termino siendo el modelo estándar de seis cuerdas.
Una de las variaciones más frecuentes es aumentar el número de cuerdas. Por ejemplo doblando su número, de 6 a 12; las seis acostumbradas, acopladas individualmente a su octava respectiva (salvo las dos más agudas, que quedan duplicadas al unísono). Además de la guitarra de 12 cuerdas, tiene relativa importancia la guitarra tenor, de 4 (usada entre otros por el guitarrista de jazz Tiny Grimes). Ciertos músicos clásicos como Narciso Yepes tocan una guitarra de diez cuerdas, independientes o duplicadas.
Nada tiene que ver con el asunto del diseño el hecho de que algunos intérpretes ajusten su instrumento a su forma de tocar, como los miembros del grupo de rock Presidents of the United States of America, que utilizan una guitarra entre las que tres de seis cuerdas han sido retiradas, y un bajo de dos cuerdas. De la misma manera, Keith Richards (guitarrista de los Rolling Stones), a menudo retira la cuerda de mi grave de sus guitarras.
También se pueden citar:
- La guitarra fretless (sin trastes), cuyo mástil es completamente liso, sin trastes, con lo cual las notas se obtienen a manera de un violonchelo (la afinación no viene dada por el traste, sino que hay que “buscarla”). Son más comunes los bajos fretless.
- La guitarra barítona, que tiene 6 cuerdas pero un tiro más largo.
- Los modelos para aprendizaje, de dimensiones reducidas (talla 1/2 o 3/4), para facilitar su ejecución por niños
- Guitarra con doble diapasón. Permite tocar con dos distintas afinaciones (de manera alternativa o incluso simultánea) durante la misma obra, sin tener que cambiar de guitarra. La mayoría de las guitarras dobles tienen una guitarra con doce cuerdas y la otra con seis cuerdas. Existen otras versiones como el instrumento de Mike Rutherford, bajista de Genesis, que es una guitarra de doce pegado a un bajo.
- Guitarra eléctrica sin clavijero, construida desde mediados de los años ochenta por la empresa Steinberger. El clavijero se encuentra en el puente de la guitarra, en lugar de estar en la cabeza.
- Guitarra slide o guitarra horizontal. Se usa casi siempre con el slide o tubo de metal o vidrio que cubre todo el dedo. Muy utilizada por David Gilmour, guitarrista de Pink Floyd.
- Guitarra de 7 cuerdas. Además de las 6 cuerdas de la guitarra, se le incorporan una séptima cuerda, más grave. La nota de la séptima cuerda es un SI. Existen también guitarras de 8 cuerdas con la misma idea. incluso existen guitarras con otros instrumentos incorporados en el cuerpo de la guitarra como la pikasso guitar que posee 42 cuerdas (de Pat Metheny).
- Roger Field patentado una famosa guitarra plegable (Foldaxe) para Chet Atkins para viajar, (en el libro "Me and My Guitars" por Chet Atkins).
Afinación
Las cuerdas de la guitarra se nombran de abajo hacia arriba —desde las más agudas a las más graves— con números ordinales: primera cuerda o cuerda prima, segunda cuerda, tercera cuerda, etc. También se las conoce con el nombre de su nota de afinación —como se hace también en los violines, violas, violonchelos y contrabajos—:
- La cuerda mi (la primera cuerda, afinada en el mi3, siendo el do3 la nota central de un piano, según el sistema de notación musical franco-belga)
- La cuerda si (la segunda cuerda, afinada en el si2)
- La cuerda sol (la tercera cuerda, afinada en el sol2)
- La cuerda re (la cuarta cuerda, afinada en el re2)
- La cuerda la (la quinta cuerda, afinada en el la1)
- La cuerda mi (la sexta cuerda, afinada en el mi1)
La misma afinación de las cuatro cuerdas graves bajada una octava (de la tercera a la segunda) es la correspondiente al bajo.
En algunas obras el compositor pide al guitarrista que baje dos semitonos (o sea un tono) la sexta cuerda —desde el mi1 al re1—.
En las partituras las cuerdas se nombran con números romanos: I, II, III, IV, V y VI.
A las tres cuerdas más graves —la cuarta, quinta y sexta cuerda y, particularmente, a esta última— se les llama “ bordones”, debido a que “bordonear” es la ejecución de un bajo acompañante de una obra de música.
También se cambian las tonalidades de las cuerdas poniendo una cejilla que se sitúa un traste más alto por cada semitono que se quiera aumentar. Por ejemplo si se coloca una cejilla en el primer traste la afinación sería la siguiente: fa3, la♯2, re♯2, sol♯2, do1 y fa1.
La guitarra de diez cuerdas es como la suma de una guitarra común de seis cuerdas y un contrabajo (afinado normalmente una octava grave: sol1, re1, la-1 y mi-1).
Método básico de afinación para guitarras de 6 cuerdas
El método clásico para afinar una guitarra es de oído. Para ello hay que seguir una serie de reglas muy sencillas.
- Primero se aflojaran todas las cuerdas.
- Las cuerdas deben afinarse siguiendo un orden alterno entre graves y agudas (una buena manera sería 1ª, 6ª, 2ª, 5ª, 3ª y 4ª) y luego deben volverse a repasar todas las cuerdas.
- Se ajusta la sexta hasta que nos guste como suene, un sonido claro y limpio.
- Ahora, la 6ª cuerda pisada en el 5º traste suena igual que la 5ª cuerda tocada "al aire".
- La 5ª cuerda en el 5º traste suena igual que la 4ª cuerda tocada "al aire".
- La 4ª cuerda en el 5º traste suena igual que la 3ª cuerda tocada "al aire".
- La 3ª cuerda en el 4º traste suena igual que la 2ª cuerda tocada "al aire". Es importante recordar esta diferencia.
- La 2ª cuerda en el 5º traste suena igual que la 1ª cuerda tocada "al aire".
En este caso el instrumento se afina para tocar él solo. Para tocar en compañía de más instrumentos estos tienen que ser afinados entre sí.
Otros métodos de afinación
La guitarra también puede ser afinada con una serie de instrumentos a saber:
- Con diapasón.
- Con silbatos especializados.
- Con afinador electrónico.
- Con programas de ordenador.
- O con la ayuda de otros instrumentos.
- Con Armónicos
Corte en la caja para notas agudas
La forma de las guitarras no siempre es simétrica. Las guitarras eléctricas y algunas acústicas y clásicas suelen presentar una especie de curva para facilitar el acceso a los trastes más cercanos a la boca, para llegar hasta las notas más agudas. Este corte en la caja se suele llamar cutaway. Dependiendo de si el guitarrista es diestro o zurdo, la guitarra se construirá con ese hueco ubicado a uno u otro lado de la caja armónica.
Ejecución
La guitarra se toca apoyando la caja armónica sobre el regazo, con el mástil o diapasón hacia la izquierda. Esto hace que las cuerdas más graves queden arriba y las más agudas abajo.
Para tocar la guitarra se apoyan los dedos de la mano izquierda (la derecha para los zurdos) sobre las cuerdas, oprimiéndolas contra el diapasón entre los trastes justo después del que delimitará el segmento de cuerda que vibra, de manera que quede libre la longitud correspondiente a la nota musical deseada.
Una vez que se ha fijado de esta manera la longitud de todas las cuerdas o de las cuerdas que se desea pulsar, la mano derecha las rasguea, puntea o arpegia, generando una melodía si toca un sonido por vez, un acorde si se ejecutan dos sonidos o más, o una armonía si se arpegia ese acorde.
En la guitarra eléctrica se suelen utilizar diversas técnicas principalmente en el rock. Entre ellas se encuentran el tapping (popularizado por Eddie Van Halen), el sweep picking (Yngwie J. Malmsteen, Jason Becker), etc.
Guitarras y zurdos
Así como en algunos instrumentos, véase el piano o la flauta, varían muy poco en función de la lateralidad del intérprete, otros como la guitarra y las cuerdas de la orquesta, violines, violas, violoncellos y contrabajos realizan con cada mano una tarea distinta. Sobre este tema hay posiciones encontradas sin que nunca se llegue a un acuerdo sobre la ventaja o desventaja de cambiar la manera común de tocar con el mástil de la guitarra a la izquierda.
Por otro lado debido a la poca disponibilidad en el mercado de guitarras adaptadas para zurdos, que se acentúa en las tiendas pequeñas, la mayoría de guitarristas zurdos que aprenden a tocar la guitarra lo hacen como diestro (es decir, poniendo la guitarra con el mástil del lado de la mano izquierda). Al público no le es posible percibir si el instrumentista es zurdo, ya que la ejecución es la misma.
Aunque son muchos los guitarristas zurdos que tocan con la guitarra girada, con el mástil del lado de la mano derecha, invirtiendo también el orden de las cuerdas, para que las bordonas queden sobre las agudas. En el caso de que el guitarrista quiera usar una guitarra con cutaway (hueco en la caja que permite tocar mejor las notas más agudas), la construcción del instrumento suele ser especial para zurdos, con los controles, las salidas, el clavijero y los recortes y acomodos de la forma de la guitarra hechos como una imagen especular de una guitarra común. Estos guitarristas no suelen poder tocar con las guitarras comunes.
Aun así existe una tercera opción, aunque son pocos los guitarristas zurdos que —tocando con la guitarra al revés— mantienen las cuerdas tal como se ubican en el orden normal de la guitarra, aunque las notas graves quedan abajo, haciéndose más difícil tocar. Ya que esto implica aprender nuevas posiciones de dedos para poner los mismos acordes y tocar invirtiendo el gesto del rasgueo y el punteo: en vez de hacerlo normalmente hacia abajo, lo hacen hacia arriba. Sin embargo, como de esta manera pueden tocar con guitarras comunes, algunos guitarristas zurdos del segundo tipo como Jimi Hendrix o Kurt Cobain han aprendido también a tocar de esta manera.
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